La única Colección Rolls-Royce en Europa con todos los modelos fabricados entre 1910-1998.
Situada en plena naturaleza y a sólo 30 km de Bilbao, la reconstruida torre medieval de Loizaga alberga además otra selecta colección de coches antiguos, clásicos y deportivos.
Abierta al público desde la década de los noventa, la Torre de Loizaga ha sido tradicionalmente un punto de encuentro ineludible para clubs de aficionados y amantes del motor en general, que gustan de plasmar sus impresiones en los numerosos foros que atraviesan la red.
En abril de 1997, en el que la Torre se convirtió en el escenario privilegiado de una flamante concentración de coches antiguos, provenientes en barco desde el Reino Unido. Representantes del “Club de Entusiastas de Rolls-Royce” (Rolls-Royce Enthusiasts’Club), en el curso de una recepción de bienvenida, tuvieron la oportunidad de entregar una placa conmemorativa a Miguel de la Vía, por la que se le otorgaba el título vitalicio de Miembro Honorífico del Club (Honorary Member for Life), en reconocimiento a un gran trabajo.
Las colecciones están distribuidas en seis pabellones. En el primero destacan lujosos ejemplares de la primera etapa del siglo XX.
. El segundo pabellón cuenta con elementos más modernos y clásicos, siendo realzado con la presencia de elegantes deportivos descapotables y de un insólito camión de bomberos del parque automovilístico inglés. En la tercera sala rivalizan en protagonismo velocísimos deportivos con los primeros ejemplares de Rolls-Rocye que apuntan en la exhibición. En el siguiente recinto se aprecia la evolución estética y mecánica de la firma británica a través de una sucesión de modelos que abarcan varias décadas.
La sala quinta despliega una selecta muestra de modelos Silver Ghost junto a la espectacular serie Phantom, que incluye uno de los modelos más exclusivos del mundo. La exposición halla su punto culminante en la última estancia del recorrido, donde relucen los primeros modelos de la serie Silver Ghost.